Si pensamos en el Pop actual, muchas de sus canciones pasan de moda a los cinco minutos y no todos los artistas están para quedarse por lo rápido que va todo. Sarah Faith Griffiths, mejor conocida por GRIFF, es una joven inglesa -de ascendencia jamaicana y china- de 20 años que sí ha llegado para no marcharse. Pero que eso no te haga subestimarla. A pesar de su corta edad, no es nueva en su trabajo. A sus 17 años comenzó a formar parte de Warner Records, siendo una de las artistas más jóvenes en ser firmada por la discográfica. Desde su entrada en el 2019, ha sorprendido a todos con canciones impactantes como “Mirror Talk” y “Good Stuff”. Este año estrenó su primera mixtape titulada One Foot in Front of Another que ha hecho que todos volteen a verla y gane mucho más reconocimiento del que ya tenía. Actualmente, tiene más de cinco millones de oyentes mensuales en Spotify, más de 25 millones de visualizaciones en YouTube y ganó además el premio de Artista Revelación de los BRITs Awards 2021.
Sin embargo, todos estos logros no hacen que GRIFF se sienta cómoda en el lugar donde está, sino que quiera mucho más. No siente que llegó el éxito, sino que todavía este es solo su comienzo y que le queda mucho camino por recorrer. “He sido bendecida por dejar la secundaria e ir directamente a la música. Pero una cosa de la que me he dado cuenta es que es un camino largo. Uno observa a personas tener éxito de la noche a la mañana. Ves a Olivia Rodrigo y dices: ‘Eso pasó de la noche a la mañana, ¿por qué no me pasó a mí?’. Pienso que todo toma mucho tiempo y trabajo duro. Así que esto es como mi comienzo, con mucha paciencia y esfuerzo”, comenta. Pero sus primeros pasos en el mundo de la música fueron en el 2019, cuando entró en Warner Records con solo 17 años, cosa que no pasa todos los días. “Me siento muy agradecida porque sé que es raro y una bendición”.
Lo que ha hecho que destaque desde el primer día es su talento para escribir canciones, su verdadera pasión. “Creo que las demás cosas puedo tomarlas o dejarlas. Mi primer amor es estar en el estudio, escribiendo canciones y eso es lo que quería hacer primero, antes de convertirme en artista. Solo quería ser compositora”, afirma. Esto es algo que a muchos artistas se les dificulta y por eso deben trabajar con especialistas para poder plasmar bien sus ideas, cosa que para ella es extremadamente fácil. Su sueño es ser como Sia o Julia Michaels, singer-songwriters femeninas que destacan porque hacen que cualquiera pueda sentir exactamente lo que ellas transmiten, a través de metáforas y melodías. Por eso, la de Kings Langley (villa inglesa donde se crió) espera poder trabajar en el futuro con otros artistas, porque menciona que los mejores son los que pueden traducir los sentimientos en canciones y eso es lo que realmente le importa: poder escribir temas, todo se trata de eso.
Pero esta no es la historia común entre artistas pop femeninas en Reino Unido. GRIFF, como muchas de sus colegas, hizo trabajos con artistas como Zedd y HONNE para poder posicionarse y a diferencia de ellas, pudo salir de esa sombra en la que muchas se encuentran atascadas. “Como mujer, es importante hacer colaboraciones sin sabotear tu carrera. He visto muchas pop girls que cuando comienzan a hacer esas canciones dance, nadie sabe quién eres por ti, sino por el productor. Así que decidí establecer mi carrera primero [antes de hacer alguna]”, cuenta. Un ejemplo de esta situación es la cantante británica Becky Hill, quien este año estrenó su primer disco titulado Only Honest on the Weekend. “Ella es increíble, peor ha pasado mucho tiempo de su carrera haciendo features con artistas dance y eso ha hecho que perdiera años para poder crear su propio disco”, aclara.
GRIFF tiene la esperanza de que este aspecto de desigualdad de género en la industria cambie y que poco a poco podamos ver más productoras y compositoras femeninas porque siempre hemos visto mujeres frente a las cámaras, mientras que detrás de ellas están grupos de hombres creando sus imágenes. “Si eres una mujer joven, creativa y puedes cantar, las personas de negocios te ven como algo que vender, así que te conviertes en un artista. Nunca te empujan a la producción o a la composición, creo que eso es algo que va a cambiar”, afirma. Por eso, suele tener mucha cautela con la manera en la que se maneja, a pesar de estar agradecida por todas las oportunidades que ha tenido. Ha escuchado historias sobre sellos discográficos y otros aspectos de la industria que no la han dejado contenta, porque le dan mucho control a las compañías, algo que se evidencia en el caso de Taylor Swift con su antigua discográfica, Big Machine Label Group, cuando fue comprada por Scooter Braun, mánager de Justin Bieber y J Balvin, entre otros.
En su primer proyecto, One Foot in Front of Another (Warner Records), ella quiso mostrar cómo es esa sensación de recuperación. “Realmente, tenía la imagen visual de una persona cayendo o de alguien haciéndose daño e intentando entender cómo caminar de nuevo y creo que es al mayor metáfora para muchas cosas en la vida, en el amor y en mi relación con la música”, describe. Algo que se hace notar en temas como “Black Hole” y el que le da el título, hasta llegar al final con “Walk” en el que la protagonista volvió a sentirse completa. Durante toda la producción podemos escuchar diferentes influencias. Pero sobre todo a Taylor Swift, HAIM, Whitney Houston e Imogen Heap. Para GRIFF, ellas junto a Lorde son su inspiración. Si su vida se pudiera definir con canciones serían: “Our Song” porque es su favorita de siempre. “Royals” porque la recuerda desde el primer momento, y “I Wanna Dance With Somebody” porque es diversión de principio a fin, que es algo que se ve en ella en todo momento.
Gracias a esta producción musical, recibió el premio a Mejor Artista Revelación en la última edición de los BRITs Awards, uno de los más importantes en la industria de Reino Unido. Fue recibido anteriormente por artistas ícono del país como Adele, Sam Smith, Florence and the Machine y Jorja Smith. Ella no lo esperaba, en realidad le cogió por sorpresa. “Mi equipo seguía hablando de estos BRITS Critics Choice Awards y yo realmente no sabía de qué estaban hablando cuando, de repente, recibo una llamada diciendo que estaba nominada y yo estaba como ‘estoy nominada a un BRIT, qué loco’. Luego lo busqué en Google y pensé ‘este es eL premio que Adele y Sam Smith ganaron’. Me sentí muy afortunada”. Pero el resultado fue que GRIFF ganó frente a las otras nominadas, Pa Salieu y Rina Sawayama. Este título es una palanca para detonar diferentes oportunidades en el mundo del entretenimiento, no solo en su país sino de manera internacional.
Cuando miramos al futuro, GRIFF se ve como María en la película de ‘The Sound of Music’ (Sonrisas y Lágrimas), libre y llena de música. La cantante british espera crear y producir su primer disco pronto, a pesar de que todavía no sabe cómo se escuchará o verá espera que sea mejor que su mixtape. “Todavía lo estoy averiguando”, aclara. Pero está segura de que tendrá canciones upbeat como en el anterior. Confía en vender todas las fechas de sus conciertos y poder colaborar con artistas como Dave (rapero de Reino Unido) y que ella considera uno de los mejores en la escena actual, y quizás hasta con Max Martin (creador de hits como “…Baby One More Time”) o Jack Antonoff (productor de Taylor Swift y Lorde) porque le intriga cómo sería pasar un día con ellos. Todavía está conociendo sus nuevas relaciones, quiere que todo lo que haga sea orgánico. De lo que no tenemos dudas es que, tal y como ella dice, este es solo el principio y ahora queda mucho camino por recorrer, paciencia, trabajo duro, historias que contar y canciones por escribir.
