Cover Story Digital, SEPTIEMBRE 2019
Texto por J RIVERA (@jayriveray)
Fotos por JESÚS LORA (@jesuslorafotografo)
Dos años le han bastado a Manuel Turizo (Montería, Colombia, 2000) para posicionarse en la industria musical latina y liderar la nueva generación de artistas urbanos colombianos, por detrás de los Maluma, J Balvin y Karol G. Un puesto que se ha ganado a pulso, y un sueño que se ha hecho realidad y que además tiene la suerte de compartir con su hermano mayor Julián, con quien se lleva tres años de diferencia. “La motivación por la música viene desde que yo nací. A él (Julián) le regalaron una guitarra y un micrófono para que no se pusiera celoso. Y desde entonces es algo que nunca paró. Al principio era simplemente como un detalle a un bebecito, un juguete. Después cuando Julián no soltaba su guitarra y su micrófono en todo el día fue cuando mis padres le metieron a una escuela de guitarra”, recuerda Manuel quien se encuentra estos días trabajando en Medellín antes de regresar a México para cumplir con nuevos compromisos profesionales. Su padre es músico, aunque fue más bien su madre la que quiso impulsarles, tanto a él como a su hermano, a aprender cada día más y más acerca de la música. “Nos decían, ‘ustedes llegan del colegio, hacen deporte, bien, pero tienen que tocar algún instrumento, no se pueden quedar quietos’. Y así fue desde que éramos pequeños”.
Manuel siempre ha tenido claro que la música iba a ser su modo de vida y que no había un plan b. A los 13 años empezó a educar la voz con una profesora cubana de canto en su ciudad natal Montería, al norte de Colombia. “Al cumplir los 15 ya me sentía con una voz fuerte, desarrollada, tenía confianza con lo que iba a hacer. Fue el momento más fuerte, me picó y me dije ‘estás perdiendo el tiempo, sabes que el sueño que tienes en tu cabeza, y que no se lo cuentas a nadie, es poder hacer música todos los días, poder encerrarte en un estudio, hablar a los medios de lo que haces… No meterte en la universidad, estar en un salón de clase, eso no es lo que quieres’. Y se lo expresé a mi mamá, a mi hermano y dijeron ‘listo, cómo así, hágale pues. No hay nada más que pensar si estás seguro de lo que quieres. Si de verdad es lo que quieres, con todo tu corazón, no lo pienses más. Hagámoslo’”, cuenta. Unos años antes de todo aquello, los caminos de los hermanos Turizo se separaron –momentáneamente- cuando Julián se marchó a estudiar leyes (Derecho) a la ciudad de Medellín. Nunca se distanciaron. “Nos llamábamos todas las noches y escribíamos hablando por teléfono. Me decía ’ey, brother, tengo esta idea, mira, (sonido de guitarra)’. Entonces me decía ‘bueno, dale dale, te llamo en cinco minutos’. Y le llamaba después y le decía, ‘mira lo que escribí’. Íbamos armando las canciones de ese modo”.
Por aquella época la familia Turizo estaba atravesando un momento crítico económicamente, pero al mismo tiempo crucial para el futuro artístico de Manuel y Julián. “Es un momento frustrante cuando necesitas dinero y necesitas conseguir quizás una carrera que muestre más seguridad económica en tu casa. Pero en realidad nosotros decidimos buscar qué íbamos a hacer con nuestras vidas”. En ese momento Manuel se fue a vivir con su hermano a Medellín. “Había que buscar cómo íbamos a producir las canciones, a mostrarlas, porque no teníamos plata. No teníamos casi ni para comprar el agua para tomar”. Así conocieron al productor colombiano Zenzei (Santiago Mesa). “Él estaba en la universidad con Julián, los dos estudiaban leyes. Por lo mismo, porque necesitaba una carrera con la que pudiese ayudar económicamente en su casa”. Lo que puede que nadie sepa es que Zenzei, quien tenía un pequeño estudio montado en el cuarto de su casa en medallo, les regaló las tres primeras producciones entre las que estaba “Una Lady Como Tú”. “Eran los primeros temas de reggaeton que hacía. A él (Zenzei) le gustaba producir rap. Nosotros le mostrábamos y él nos decía ‘no les voy a cobrar, vamos a trabajar juntos. Vamos a hacer tres canciones juntos y ver qué pasa’”. También le llamó mucho la atención el color de la voz de Manuel. “Fue la primera persona que nos lo dijo, que mi voz tenía un color demasiado peculiar, muy característico. Así que empezamos a trabajar esa misma semana”.
“PERSONALMENTE ME CONSIDERO VERSÁTIL, NO ME LIMITO. SOY UNA PERSONA QUE SI ME GUSTA NO IMPORTA QUÉ GÉNERO SEA. SI ME GUSTA LO HAGO; LO INTENTO HACER DE LA MEJOR MANERA, ASÍ TENGA QUE PRACTICARLO. SIMPLEMENTE ME DEJO LLEVAR POR LA MÚSICA. ME GUSTA MUCHO EL GÉNERO URBANO, PERO SIMPLEMENTE DEJO QUE LA MÚSICA ME LLEVE. A NOSOTROS NOS GUSTA HACER REGGAE, BALADA, POP, REGGAETÓN, RNB, Y ESA FUE LA MUESTRA QUE QUISIMOS DAR EN EL ÁLBUM. QUE MANUEL TURIZO NO ES UN ARTISTA DE UN SOLO ESTILO, PUEDE SER TODOS LOS GÉNEROS” – MTZ
“Una Lady Como Tú” supuso el despegue –y menudo despegué- de la carrera de Manuel Turizo; a día de hoy cuenta con más de 390 mill. de streams en Spotify y más de 1 billón de views en YouTube. Un tema que lo lanzaron de forma totalmente independiente sin discográfica ni promoción alguna de por medio, y que inexplicablemente se viralizó en Colombia según cuenta Manuel. “Recuerdo que era diciembre acá. Son las vacaciones de verano aquí en Colombia. La canción empezó a sonar mucho, nadie sabía quiénes éramos, nadie nos conocía, pero el tema estaba funcionando. Entre todas las personas que se conocían de la universidad se las mostraban unos a otros. Se fue difundiendo por Instagram. Y entonces en ese momento la canción estaba número uno en todas las plataformas digitales”. Comenzaron a recibir un aluvión de llamadas por parte de mánagers de muchos artistas importantes, y en ese momento apareció en escena Juan Diego Medina, de La Industria Inc. y mánager/socio de Nicky Jam. “Fue el único que llegó simplemente ofreciendo trabajo. Nos dijo que le gustaba mucho lo que estábamos haciendo, que le parecía muy chévere y que teníamos un hit nacional, mundial. Hubo química por la transparencia en cómo se dieron las cosas y empezamos a trabajar con él. Nos ayudó a darle una dirección, una proyección a todo esto que tenemos en este momento. Aquello era un carro loco que se estaba moviendo, pero Juan vino, le puso el timón y para allá es que vamos”, cuenta Manuel.
Ahora con ADN (2019, La Industria Inc./Sony Music Latin), su primera producción discográfica -lanzada el pasado 26 de agosto-, los hermanos Turizo culminan un sueño de la infancia. “Empezó con ‘Una Lady Como Tú’, y desde entonces teníamos nuestro sueño del primer álbum; siempre hablábamos de nuestro primer proyecto musical y lo imaginábamos mucho porque sentíamos que era un paso muy crucial, muy importante en la carrera de un artista. Pasar de pegar sencillos a un reto más grande. Quizá pegar un sencillo sea algo fácil comparándolo con un álbum (16 canciones en el caso de ADN). Era un reto muy grande personalmente para nosotros y estamos muy contentos con la respuesta que está teniendo”, explica Manuel. No piensan ‘bajarle’, ni mucho menos. “Trabajando muy duro para que esto no decaiga. A nosotros de verdad nos gusta que la música se quede en el corazón, en la mente de nuestros fanáticos. Que de verdad la sigan escuchando de por vida”. Un proyecto que ha sido un proceso de mucho aprendizaje para ambos. “Fue como si volviéramos a nacer en la música. Nos sentamos con la mayor cantidad de productores que se nos dio la oportunidad. Esto no es un álbum de un solo productor y lo hicimos de lleno entero. Nos tomamos mucho tiempo”.
Si no hubiera entrado en la música no sé qué estaría haciendo con mi vida”
MANUEL TURIZO
Si algo tiene ADN es una gran variedad musical, desde reggaetón (“Sola”, “Bailemos”) al acústico (“Culpable”) pasando por el Pop (“No Le Perteneces”), reggae, vallenato (“Caso Perdido”) y hasta RnB con tintes Trap (“Una Vez Más”). “Queríamos que cada canción sonara muy distinta, que tuviera una identidad completamente diferente, que todas las canciones te hicieran sentir cosas distintas, que ninguna se pareciese a otra para poderlas aprovechar todas completamente. Nos sentamos con productores de Puerto Rico como Chris Jeday, Gaby Music; con muchos colombianos como Zenzei, Rolo, Jowan, Sky, Saga WhiteBlack, Mosty, KZO, Ily Wonder; con compositores para que escribieran con nosotros”. La grabación del disco se ha llevado a cabo entre Medellín, Miami y durante los numerosos tours que han abordado en estos dos últimos años. “Aprovechamos cuando estamos en giras y cuando terminamos los conciertos nos encerramos en una habitación; tenemos nuestro equipo de grabación portátil que lo podemos llevar a todos lados. Nos encerramos en la habitación (del hotel) a grabar, hacer música. La mayoría de las canciones las hicimos de esa manera, viajando por el mundo”. El tema favorito de Manuel es “Nada Ha Cambiado”, cuyo videoclip se filmó en Antigua Guatemala, ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad. “Fue un experimento que quisimos hacer. La canción empieza como balada, a la mitad se vuelve reggae y en el último coro se vuelve un reggaetón. No la puedo comparar con nada, por eso es una canción bien especial para mí”.
A pesar de tener 19 años, Manuel Turizo nunca ha descuidado el aspecto lírico en su música y es algo que siempre ha tenido muy en cuenta para poder conectar con grandes masas y no limitarse a un nicho de mercado (público adolescente). “Cuando lanzamos ‘Una Lady Como Tú’ nos dimos cuenta de que teníamos la oportunidad de poder tocar públicos que no necesariamente son oyentes urbanos, que es en el área que nosotros nos movemos. Hemos tenido la oportunidad de tocar muchos más públicos: niños, señoras y señores mayores…” Y es que curiosamente las madres de sus amigos son más fanes de Julián y Manuel que sus propios amigos. No les gusta utilizar palabras que puedan herir la sensibilidad, y tratan de no ser explícitos en las canciones. Hasta en su último sencillo “Me Enamoraste”, en el que colabora Anuel AA (uno de los artistas más dirty del género urbano), han conseguido que el trapero boricua suene más clean que de costumbre. “Si vamos a hablar acerca de sexo vamos a hacerlo de una manera seductora, que le guste a una mujer. ¿Cómo seducirías en realidad a una mujer si quieres tener sexo con ella? Yo pienso que así nos enseñaron a decir las cosas. Las cosas suenan mucho mejor dichas de una manera bonita, buscando la mejor forma de decirlo que con la primera cosa que se te viene a la cabeza como ‘te quiero dar’, no, no te quiero dar, ‘estás bien bella, por eso ven, baila conmigo que yo te robo esta noche’. Es muy distinto”.
El cantante y compositor colombiano se ha convertido en un artista maduro y versátil que ha ido progresando día tras día, lo que se ve reflejado en su primer trabajo ADN donde no se ha puesto límites, simplemente fluye. “Soy una persona que, si me gusta, no importa qué género sea. Si me gusta lo hago; lo intento hacer de la mejor manera así tenga que practicarlo. Me gusta mucho el género urbano, pero simplemente dejo que la música me lleve. A nosotros nos gusta hacer reggae, balada, pop, reggaetón, RnB, y esa fue la muestra que quisimos dar en el álbum. Que Manuel Turizo no es un artista de un solo estilo, Manuel Turizo puede ser todos los estilos”, afirma. Su característica voz, diferente a la de otros exponentes del género, le ha hecho marcar la diferencia. “Mi voz tuvo un cambio cuando tenía 14-15 años. Empezó a tomar otro color, no era así de gruesa. Mi voz era más de niño, más de joven. Entonces no me da nervios ni me da temor que mi voz cambie porque a medida que mi voz vaya creciendo va a pasar al revés y el color distintivo que tiene mi voz se va a ir resaltando más. Ese color grave, profundo, que a la gente le llamó la atención. Mientras van pasando los años mi voz va sonando más madura, con más experiencia, se siente cada vez más grande. El problema de las personas que empiezan jóvenes es que a su voz se les baja el tono. A mí si el tono me baja más, al revés, me va a ampliar el registro porque la verdad que no soy un artista que cante en tonos altos sino en tonos bajos. Así que creo que eso va a beneficiarme”.
“VAMOS A EMPEZAR A GIRAR POR TODOS LADOS CON EL NUEVO SHOW, QUE TIENE TODO EL CONCEPTO DE ‘ADN’. Y NO PARAMOS DE HACER MÚSICA, NUNCA. YA TENEMOS LISTO EL SEGUNDO ÁLBUM, PERO CON PACIENCIA; LE QUEREMOS DAR TIEMPO A ESTE PRIMER TRABAJO. NOS GUSTA DARLE UN POCO DE VIDA A LOS TEMAS PARA QUE LAS GENTE LOS CAPTURE DE VERDAD Y NO LOS OLVIDE. VAMOS A EMPEZAR A SACAR LOS VÍDEOS DE TODAS LAS CANCIONES DEL DISCO. LE ESTAMOS DANDO UN POCO MÁS DE CANCHA AL VÍDEO DE ‘TE QUEMASTE’, PARA QUE SE LO DISFRUTEN Y YA DURANTE LAS PRÓXIMAS SEMANAS IREMOS LANZANDO EL RESTO VÍDEOS DE LOS SENCILLOS DEL ÁLBUM” – MTZ
La relación de Manuel y Julián Turizo va mucho más allá de la música. Tener a su hermano a cada paso le ha beneficiado para mantenerse enfocado y no perder el rumbo. “Mucha gente te puede hablar, decir cosas, pero no sabes la intención. En cambio, un hermano siempre te va hablar con la intención de hacerte mejorar, de ser mejor. Es una exigencia mutua. Decir las cosas sin miedo porque nos ves rodeados de muchas personas, pero es distinto porque son personas que trabajan contigo; cuando alguien trabaja contigo ya no te habla con la misma transparencia. Un hermano siempre te va a hablar con transparencia y te va a decir las cosas claras en el ámbito creativo y ahí se necesita trabajar sin egos”. Como bien dice, no es fácil encontrar personas en las que confiar dentro del negocio musical. La vida del artista es muy inestable, con subidas y bajadas, y Manuel es consciente de ello. “Nos pasamos moviéndonos alrededor del mundo todo el tiempo. No estamos con las personas que en realidad nos quieren y queremos, que sentimos como hogar y mi hermano es un pedacito de hogar que siempre va conmigo, que tengo al lado y eso es algo muy bueno”. Actualmente, además de su hermano Julián, cuenta con otra amiga y confidente como es su novia, la modelo e influencer colombiana Joselina Sorza quien protagonizó el videoclip de “Nada Ha Cambiado”. “Nos conocemos desde hace varios años. Pero la verdad que me gusta manejar mi vida personal, muy personal, para poder seguir teniendo una parte de mi vida donde puedo sentir que es mía, que nadie me va a interrumpir ni tiene derecho a opinar”, aclara.
Esta posición que muchos podrían considerar como ‘privilegiada’, Manuel la toma con mucha responsabilidad y compromiso. Quiere que esto dure toda la vida. “Estoy cumpliendo mis sueños. Soy muy joven y espero a los 70 años poder seguir viajando, pararme en una tarima a cantar mi música ante el público. La realidad es que hay que tener mucha disciplina, trabajar mucho y meterse al estudio todo el tiempo. La música evoluciona muy rápido y si queremos evolucionar con ella tenemos que estar preparados. Hoy estamos con ADN sí, pero tenemos que estar listos para lo que viene mañana y pasado mañana también, entonces lo tomo con un compromiso muy fuerte. Es algo que no quiero que se vaya de mi vida nunca.” Por eso sabe que tiene que cuidar su principal herramienta, la voz. Y hace una importante reflexión sobre esto mismo, en un tiempo donde el auto-tune tapa o disimula las carencias vocales de muchos artistas -no vamos a decir nombres- ya sean latinos o anglos. “Si vas a ser cantante tienes que cantar, es algo fundamental. Es muy bonito ver fashion, una tarima grandísima, porque al final cuando vamos a un concierto queremos ver un espectáculo. Pero tiene que partir de lo vocal. El arte que estamos expresando es cantar, es música. Y la verdad me siento orgulloso de poder ser de los que me paro en cualquier lado sin ningún problema, en la esquina, donde quieras y te canto lo que quieras. Sé que en estos momentos se está perdiendo mucho. Por la tecnología nos estamos volviendo un poco perezosos. El talento no se lleva en la tecnología, se lleva en la sangre. Quien canta de verdad te demuestra que realmente merece la pena que pagues un ticket de un concierto y te sientes a ver qué es lo que está haciendo. Si esa persona no canta no se merece que compres un ticket y vayas a verlo”.