Este próximo mes de agosto se cumplirán diez años desde que Santiago Salviche abandonase su Málaga (España) natal para buscarse un futuro en la meca del cine, Los Ángeles (California), primero como actor y después como director. Antes de cruzar el charco, Salviche pasó varios años viviendo en Escocia. Una vez asentado en L.A., montó una productora, se puso detrás de las cámaras y comenzó a dirigir comerciales para firmas tan importantes como Emporio Armani o la popular bebida energética Gatorade, entre otras grandes marcas. En su camino se cruzaría el director dominicano Jessy Terrero, uno de los pesos pesados de la industria musical latina y juntos empezarían el proyecto de Cinema Giants. «CG nace de sentarme con Jessy, tomar un café, y decir ‘vamos a montar una compañía que le de amor al mercado latino en Los Ángeles’. Él también tenía la misma dirección. La compañía empieza con él y yo completamente solos. Yo estaba haciendo muchas cosas de anuncios y comerciales, no hacía muchas cosas de música pero dije ‘tenemos que abrir una compañía que le amor al mercado latino y represente el mercado de habla hispana aquí en LA porque no había ninguna’; todas las compañías estaban en Miami, Colombia o Venezuela. Entonces empezamos Cinema Giants nosotros solos. Yo ya tenía experiencia con mi compañía, así que la fusiono al sistema de Cinema Giants y lo creamos desde cero. Entonces a raíz de ahí tomo el papel de productor ejecutivo para organizar un poco ‘el circo’.»
Tras más de un año y medio trabajando con Cinema Giants y habiendo producido más de 70 vídeos musicales, incluyendo trabajos para artistas latinos de primera fila como Maluma («El Perdedor», «Sin Contrato»), Ricky Martin, Farruko, Yandel o Wisin, llega el momento en el que Salviche decide volver «a la acción», ponerse otra vez dirigir y es cuando da un giro de 180 grados a su carrera. Llega el momento de colgar ‘la corbata otra vez en el armario’, como él dice. Gracias a esta decisión y la experiencia que adquirió se le presenta una gran oportunidad de volver a empezar, y no la desaprovecha. Cuando parecía que iba a volver a hacer anuncios para marcas -lo que hacía antes de la etapa de Cinema Giants-, a Santiago y su equipo de la compañía Axis 3 Studios les empiezan a surgir nuevos proyectos musicales y comienzan a rodar videoclips para grupos como los mexicanos CD9, la artista brasileña Ludmilla o el cantante chileno Schuster. «Acabamos de hacer un vídeo con un grupo que se llama dvsn, de OVO Sound (Drake) y está a punto de salir. Lo grabamos en México hace poco, antes del vídeo de JLo. También para Mariah Carey. Es una evolución de volver a sentarme a dirigir y adoro esta parte del proceso. Ahora voy a hacer una serie para Netlfix en colaboración con US Arminia, una serie de 10 episodios», cuenta Santiago Salviche con un característico acento malagueño.
Cuando hablamos con Salviche, apenas han pasado 48 horas del estreno mundial del videoclip «El Anillo» de la ‘bomba latina’ Jennifer Lopez; va camino de los 20 mill. de views en YouTube. Lo «peor» ya ha pasado y puede tomarse un pequeño respiro; ha sido una semana de infarto con viaje a los ‘Premios Billboard de la Música Latina 2018’ en Las Vegas incluido. El resultado del trabajo es impecable y se le nota orgulloso de este vídeo que, junto a su team, han convertido en una película épica al más puro estilo ‘Juego de Tronos’ o ‘El Señor de los Anillos’.«El vídeo lo hicimos en una secuencia de dos días. A principio era en diferencias ciudades en la que íbamos a grabar. Primero entró Miami, luego volvió a Los Ángeles y luego a Miami porque Jennifer (Lopez) tiene un calendario muy pesado, hay que seguir donde ella esté y tuvo la oportunidad de tener dos días libres. Tuvimos que montarlo en 6 días en Los Ángeles. Entonces mi equipo, que son un pequeño “ejercito” de gente maravillosa, empezó a preparar todo. Un día era en Downtown LA donde encontramos un hotel que tenía muy pinta de 1920-30, muy a lo castillo, con ballrooms y salones lo suficientemente grandes como para transformarlos en un castillo, y obviamente, el equipo de arte pues transformó el hotel por completo; paredes, detalles de estructuras en la pared, soldados, velas… Era un hotel que estaba iluminado completamente por luces artificiales y nosotros cambiamos todo a luz de velas. Fue un trabajo de arte muy bueno realizado por nuestro cabeza de arte. Ese fue el segundo día. El primer día fue prácticamente en un estudio de tele normal y corriente donde construimos la sección de la piscina, la de las luces y la parte de la capilla de boda.»
Todo el concepto del videoclip -que está cargado de metáforas- siempre tuvo como foco principal ‘la Reina corona al Rey’; JLo es claramente la Reina que elige a su Rey (el actor español Miguel Ángel Silvestre). El objetivo era claramente romper los estereotipos y cambiar los roles de la historia en la que el Rey es siempre quien elige a la Princesa. Estamos en el siglo XXI. «Nos mantuvimos 40% videoclip porque no podíamos salirnos mucho de la vena de un videoclip, sobre todo porque era un beat muy rápido pero al mismo tiempo desde un principio dije ‘chicos, hay que cambiar el ángulo del vídeo, hay que ir a formato película, esto es una narrativa’. Aparte de Shakira o Beyoncé, Jennifer es una de las pocas artistas que de verdad puede acarrear este vídeo. Es claramente ‘la reina’ de su movimiento latino, neoyorquino, americano». El vídeo, que se estrenó el pasado viernes (27 Abr.), se grabó hace una cinco semanas. Para un rodaje de este calibre se requiere unas 5-6 semanas de pre-producción. Realmente el proceso de «El Anillo» empezó dos meses atrás. «Para este videoclip en concreto estuvimos como 90 personas. Éramos 65 de la parte de mi compañía, del equipo de filmación; cámaras, grúas, luces, director de fotografía y su equipo, mi productor Devon Libran y nuestra compañía de Axis 3 Studios. Luego 19 bailarines para la parte de las flores, creo que eran 6 bailarinas para la coreografía principal. Un total de 120 personas más o menos».
Antes de que ocurriese todo esto y se pudiera llevar a cabo la grabación del videoclip, Santiago y su equipo tuvieron que «competir» con otros directores americanos y latinos que también presentaron sus propuestas a la compañía de la diva del Bronx (Sony Music Latin). JLo estaba buscando un director de habla hispana para este proyecto en particular y la idea que más les gustó fue la de Axis 3 Studios. «Me dijeron: ‘a Jennifer le gusta la idea, súbete a un avión y vete a Las Vegas’. Fui a verla a Las Vegas. Me senté con ellos, con ella y con su mánager Benny Medina durante un tiempo para hablar del tema porque obviamente me conoce la gente mucho por producción pero dirección como que ‘¿cómo?’. Y nada, nos sentamos allí. Hablamos un ratito en Las Vegas justo antes de sus shows y todo fue muy positivo; mucho cariño por parte de ella y de Benny. Y raíz empieza el movimiento. Se comisiona el vídeo. Comenzamos las dos semanas de preparación, que si Miami, que si LA. El equipo estuvo preparado y ahí fue como empezó. Una cita, una charla para ver si estábamos viendo todo al mismo nivel y efectivamente Jennifer… yo para mí necesitaba que ella estuviera en un sitio de altísimo calibre como la reina que es y se cerró todo», explica Santiago.
Otro de los apartados que más llaman la atención al ver el videoclip de «El Anillo», y en el que también se ha cuidado hasta el más mínimo detalle, son el vestuario tanto de sus dos protagonistas principales, Jennifer Lopez y Miguel Ángel Silvestre (‘Sense 8’), como del resto de actrices y bailarines que intervienen. Del estilismo de todos los personajes -a excepción de JLo- se encargó Ramee Randall. «Ella ha hecho estilismo con todo lo de Maluma, lo de Ricky Martin, ha trabajado mucho con nosotros. Es una chica afroamericana y tiene muy buen un ojo y también acceso a muchas cosas aquí en Hollywood. Muchas piezas vienen de Balmain, hay otras que estuvieron hechas a mano, hay muchos estilistas y marcas (Tom Ford, Khosla Jani Couture, Elie Madi, Stuart Weitzman, H. Crowne…) que se volcaron para apoyar a Jennifer. Nosotros tiramos de la ropa del mismo sitio donde la tira ‘Juego de Tronos’. Del mismo equipo de creación, de customs, de los estudios. Entonces hay muchas partes de esas y otras venían de Jennifer. Hay muchos trajes y diseños que Jennifer ya tenía en mente. Había dos grupos de estilismo. Estaba el mío, que se encargaba de todas las reinas y los bailarines, y el de Jennifer que era específicamente para ella. Juntamos los dos equipos para que hubiera una línea muy específica durante todo el vídeo. Es un vídeo que tiene capas y obviamente una de ellas son los looks. El look de Reina, los vestidos, los movimientos, el baile, el aire cinemático». El maquillaje y la peluquería de cada una de las reinas lleva además el sello personal de Jasmin Junio.
En cuanto a la aparición inesperada de Miguel Ángel Silvestre, Santiago nos cuenta por qué decidieron apostar por el actor castellonense. Todo fue a través de un amigo en común. «Este tipo de vídeo tampoco era representativo de modelos, era representativo de actores; a excepción de la chica japonesa de la catana que sale en el vídeo, el resto son actores que están todo el día buscando oportunidades de trabajar. Y eso para mí también fue muy importante, conseguir un grupo de actores y actrices que representaran los papeles de individuos y no que se vieran como modelos, y eso era parte de romper el molde de videoclips. Así que estoy viendo modelo, modelo, modelo y obviamente esto tiene que ser una persona que sea ‘un Rey’. Y se me pasa por la cabeza Miguel Ángel, ‘es que este es el rey. Este muchacho es un tremendo actor’; hay un cierto carácter que hay tener para aguantar la postura de Jennifer Lopez . Llamo a mi amigo Carlos, le digo ‘dile a Miguel Ángel que estoy haciendo un vídeo con Jennifer, que por favor me llame’. Nos sentamos a tomar un café en un Starbucks. Le comento el tema, porque él nunca ha hecho un videoclip; eso era la cosa especial también. Pero cuando le comenté de qué iba, cómo era y de qué tipo de modelo era, se volcó muchísimo al igual que su agencia por encima de todo el mundo. Conseguir ese factor sorpresa». Y vaya si lo han hecho. A todas luces, un firme candidato a mejor videoclip del año.
Texto: Jay Rivera
Fotografías: Devon Libran
