Bryson Tiller - TRAPSOUL | Discos | UMOMAG

Bryson Tiller

TRAPSOUL

RCA Records/Sony Music, 2015

RnB Alternativo/Rap

Valoración: 9.0

Disponible en: Amazon | iTunes

Sonidos envolventes, baterías y pulsos conseguidos a base de 808, definen el álbum debut TRAPSOUL del newcomer de Louisville Bryson Tiller. Las 14 canciones, todas introspectivas, sin una sola colaboración, permiten a Bryson brillar en un debut en toda regla.

El álbum es íntimo, relajado en parte. Con canciones como «Don’t» y «Exchange», favoritas del público, Bryson se gana al público femenino cantando sobre seducir a una chica con el corazón roto y sobre relaciones pasadas. Pero no sólo se gana a las féminas; todo el proyecto es romántico: «Been That Way», con un beat lento, y tierno muestran a un Tiller más vulnerable entonando «I wanna know how we became so distant girl». Incluso temas destinados a turn-up como «Sorry Not Sorry», sobre un sampleado del videojuego Street Fighter, tienen el amor como temática de fondo; cantando y rapeando hace una declaración de intenciones: él es el próximo artista en dar el salto. «My numbers going up I feel the buzz coming (…)» «(…)why don’t you shut up, it’s the motherfucking 502 come up» y expresa, al mismo tiempo, su desdén por las chicas que se le arriman sólo por el éxito «(…) And we like bitches with their own shit. We don’t like gold-diggers». Es precisamente esta fórmula de cantarle a la mujer y exaltar unos valores éticos tanto para él como para ella, la que no suele fallar, como han demostrado otros antes que Bryson, como Drake o The Weeknd por ejemplo.

Otra fórmula infalible y más en los tiempos que corren es precisamente la del «trap-soul»: giros traperos, el efecto de las baterías bien marcadas y movimientos de cabeza arriba y abajo, mezclados con la cada vez más habitual entonación y medio rapeo en vez de usar los códigos típicos del trap tan trillados hoy en día. El alt-rnb y contemporary-soul se presentan más como solución a la monotonía de sonidos de estos últimos dos años. Artistas como Majid Jordan, PartyNextDoor o Kehlani, forman esta nueva ola de un estilo que no se conforma con tener barras. Un estilo en el que el input del artista en el resultado final está multiplicado x20, ya que la entonación y lírica que exigen este tipo de temas es mucho más cuidada. Por este nivel de exigencia, cuando un tema de «trap soul» funciona, tiene que triunfar y eso es precisamente lo que ha sido el debut de Bryson. Un éxito medido hasta el último detalle: visuales de temas muy concretos («Sorry Not Sorry», «Don’t»), una estética constante y simple, pero atractiva para los jóvenes: deportivas a la última, una gorra Nike habitualmente, camisa y/o sudadera, ninguna colaboración conocida, exceptuando la voz anónima femenina de «Right My Wrongs», muy pocas canciones online. Todo calculado para presentar al mundo a Bryson Tiller, o lo que quiere él mostrarnos a nosotros.

TRAPSOUL funciona a todos los niveles: en el club, en momentos sentimentales de helado y clínex, y sin duda para los románticos con corazón de trap (véase «Ten Nine Fourteen»). Está claro que aunque aún no está preparado para ser coronado rey, Bryson Tiller se ha ganado su puesto como posible heredero.