Robert Glasper

BLACK RADIO 2

Blue Note Records, 2013

Jazz/Soul

Valoración: 7.0

Disponible en: Amazon | Itunes

Lo esencial, el concepto de Black Radio, no se ha evaporado en el volumen dos. El tirar de las orejas al jazz en aras de entremezclarlo aún más en los distintos aspectos de la música urbana y viceversa, es un hecho que continúa intacto en la mente del pianista y en su trabajo. Por otro lado se nota que hay mucha más mano en la producción, es menos espontáneo quizás, pero está plagado de colaboraciones notables al igual que en el anterior disco. Brandy, Emeli Sandé, Jill Scott, Snoop Dogg, Norah Jones y un largo etcétera ponen su granito de arena, unos con Neo-Soul, otros a través del Hip-Hop y el R&B, y en su línea Glasper consigue otra vez que nada sea normal.Ni diez meses se ha tomado Robert Glasper para preparar nuevo disco tras haber ganado su primer Grammy con el álbum Black Radio. Sin un respiro, la continuación de su proyecto catalogado como excelente, ve de nuevo la luz con Black Radio 2. Dice un adagio que: «segundas partes nunca fueron buenas», y es muy probable que al mencionar el 2 muchos ya hayan puesto pies en polvorosa, pero… En esta vida hay que testearlo todo, si no que se lo digan a Glasper.

Continúan haciéndole compañía en su proyecto de alquimia, The Robert Glasper Experiment, una banda formada por Casey Benjamin al teclado y el vocoder, Derrick Hodge en el bajo y Mark Colenburg en la batería, si bien, tienen estos un protagonismo muchísimo más sutil.

El álbum está compuesto por dieciséis canciones de las cuales la mayoría son cosecha propia, en la «Intro», cada uno se presenta en su estilo, el sello de la casa. El LP tiene piezas para cada momento, no es ni necesario escucharlo de seguido. «I Stand Alone» con Common y Patrick Stump invita a la reflexión, «Calls» junto a Jill Scott es la joyita de la corona, lleva impregnado el concepto en su totalidad. La calidez de Marsha Ambrosious en su interpretación de «Trust» es encomiable. Floja se queda Emeli Sandé con «Somebody Else», en comparación con el resto de féminas del disco, escúchese a Norah Jones en «Let It Ride», eso es otra cosa.

Pondrán tal vez el grito en el cielo los puristas, ya que la cosa finaliza con una cover de «Lovely Day» de Bill Withers, un final con broche donde la virtuosidad de Robert Glasper termina por confirmarse. Y sí, Black Radio 2, no revoluciona, pero tampoco está nada mal, fuera adagios y clichés.