Drake

NOTHING WAS THE SAME

Cash Money/Universal, 2013

Rap/R&B/Pop

Valoración: 9.5

Disponible en: Amazon | iTunes

Un tipo con la sobreexposición mediática de Drake es un objetivo muy apetecible para ciertos guardianes del buen gusto al borde de un ataque de hipsteria. Puede que por ello se haya visto a muchos con el cuchillo entre los dientes, esperando la salida de este disco para despedazarle. Pero más allá de los oropeles, los líos de faldas y el faranduleo está la música, y a ella hemos de remitirnos para comprender la trascendencia y profundidad de una propuesta como la del artista canadiense de 26 años.

Contando de nuevo con el apoyo de Noah «40» Shebib, su auténtica mano derecha en el aspecto musical, Nothing Was The Same se nos presenta como la continuación sonora de todo lo que escuchamos en Take Care. Liberado ya por completo de cualquier cliché estrictamente asociado al rap su música transita libre a medio camino entre el pop, el rap y el R&B, conformando un batiburrillo sonoro en el que cada pieza encaja a la completa perfección. Basta escuchar «Tuscan Leather», o como dar todas las vueltas posibles a un pequeño sample de Whitney Houston, para entender a qué punto de estilización ha llegado su música.

«Too Much» junto a Sampha, la gran revelación británica del año, o «From Time», con la aportación de la vocalista Jhené Aiko, no sólo nos regalan algunos de los mejores momentos de su carrera, sino que resumen la pura esencia de un Drizzy pletórico a nivel lírico y musical. Sus reflexiones acerca de su vida de estrella y de como ésta ha afectado a la relación con su madre o su tío, dos figuras fundamentales dentro de su universo personal, así como de la recuperada relación con su padre, hablan de un tipo consciente del que para bien o para mal, «nada volverá a ser lo mismo», tal y como nos deja claro desde el mismo título del álbum.

Otro de los puntos clave del disco es la presencia de Hudson Mohawke como responsable de «Connect». Una producción brillante, sobre la que, con el pretexto de un sample vocal del mítico «Swang» de Trae, Drake completa otra de sus descarnadas fábulas acerca de su complicada relación con las mujeres. Mención aparte merece también «Hold On We’re Going Home». Liberado por completo su faceta como rapper, el de Young Money se destapa como el eficiente vocalista que en efecto es, evocando gozosamente ese sonido a medio camino entre el R&B y la new wave que Human League representaron en la segunda mitad de los 80.

Una vez escuchamos el disco la pregunta es obvia: ¿Habrá llegado a una excelencia imposible de igualar? ¿Será capaz de reinventarse? El tiempo nos dará las respuestas. En cualquier caso, lo ha vuelto a hacer. Una vez más se ha sacado de la manga una obra maestra. Uno de esos discos destinados necesariamente a marcar tendencia y trascender en el tiempo. Un tipo llamado Bootsy Collins dijo una vez que esa era la definición de un clásico. Habrá que creerle.