The Weeknd

KISS LAND

XO/Universal Republic, 2013

R&B

Valoración: 6.0

Disponible en: Amazon | iTunes

Enfrentado a la querencia de muchas propuestas dentro del Soul denominado Retro o, más pedante, revisionista, The Weeknd rompe con ello sin pestañear. Ofrece atmósferas llenas de sintetizadores, cajas de ritmos y atmósferas lúgubres y oscuras.

El valor de Abel Tesfaye es atreverse con su primer disco «oficial» con una propuesta tan personal e introspectiva. Él mismo apuntó que se trataba de un disco que ilustraba las sombras y los miedos de un momento vital en el que estaba adentrándose a una velocidad vertiginosa.

Su tapiz sonoro está compuesto de canciones insertas en un concepto más que preclaro, pero echamos de menos canciones no ya con autonomía, sino con una mayor pegada. Igual tendríamos que prescindir de insertarlo en la cultura e impostura del «Single» comercial, pero nos maravilla pensar que este relativamente nuevo artista se pasa ese dogma por el arco del triunfo.

Un triunfo que le hizo compararle en talento con Michael, no por similitud, sino por romper esquemas. Bueno, no seremos nosotros quienes a pesar de la anémica escena de ídolos megalómanos, apostemos por frases tan lapidarias, pero hay que reconocer que «Pretty» es una obra de arte tan extensa como llena de inspiración.

Drake aporta unos versos a este universo que nos recuerda a «Blade Runner», a los amores sintéticos y a miradas huidizas en un mundo apocalíptico. Un mundo en el que este artista se encuentra cómodo, donde aporta sin duda cosas nuevas y se aleja del cliché del pack «abdominales+ooh baby» tan manido y agotado.

El éxito le lleva a la introspección, a las habitaciones de hotel, a los excesos quizá y a las mujeres de tanga fácil. Una forma de contar historias muy personal e inspirada, manifiesta en «Tears In The Rain» se consolida a medida que va avanzando el trabajo hasta encontrarnos con la luminaria «Wanderlust», que demuestra a las claras que Abel no es un triste y que también puede llegar a ser «groovy». Poco a poco, este otrora anónimo artista se soltará, superará las comidas de los aviones y los alaridos de “groupies” despiadadas y nos dará mucho más de él, esperemos que sin perder su contrastada autenticidad.