Todo el mundo parecía preparado para uno de los shows más energéticos de la gira Blackcelona. Aún siendo miércoles, la zona de conciertos del Jamboree (Barcelona), esta vez preparada para un concierto a pie, estaba a rebosar y la gente ya bailaba al ritmo del deejay antes de empezar. La entrada: impecable. Los músicos aterrizaron en el pequeño pero cálido escenario aún sin su musa Koko-Jean Davis e hicieron uno de sus temas instrumentales. Sin duda, una muy buena forma de calentar motores.
La explosiva mozambiqueña Koko llegó enfundada en uno de sus característicos vestidos de cocktail, animando aún más (si era posible) a los fans. Empezando por temas clave del nuevo disco como «Don’t You Dare Tell Her» o el que da nombre al álbum Sometimes Too Much Ain’t Enough. El público no tardó en transportarse al mundo del old school Soul de los años sesenta. Un matiz muy típico en los conciertos de los Excitements son los pequeños monólogos que hace Koko antes de empezar una canción. Especialmente en el hit «Ha, ha, ha», la cantante critica los hombres más retrógrados, guiña el ojo a las ladies y les invita a reírse con ella.
Interactuando constantemente con el público, la actuación del grupo de la Ciudad Condal es una bomba atómica de energía a la vez que es un homenaje a los grandes. Comparada e identificada con Tina Turner, Koko-Jean es una defensora de la mujer independiente, sexy e inconformista, y eso se nota en cada canción y en cada puesta en escena. Después de un primer «final» de concierto, el grupo reapareció, acabando con una increíble versión de «I Need You Baby» de Lauryn Hill.
El grupo barcelonés ha paseado su rhythm’n’blues por toda Europa antes de encontrar un hueco en las salas españolas. Pero esto ha cambiado en el último año y el estilo retro e irresistible de The Excitements ya llena salas en todo el país, así lo demuestran sus recientes conciertos en Madrid, Murcia, Lleida o Bilbao. Concretamente en Barcelona, han resurgido muchas salas de tradición jazzística como el Harlem Jazz Club, con deejay de música negra todos los sábados, o el mismo Jamboree, clásica sala de jazz abierta a nuevos estilos. Así, en los últimos años, aquellos grupos que se veían obligados al exilio ahora empiezan a tener su propio espacio.
La consolidación de The Excitements es una firme prueba de este resurgimiento. El grupo está on fire. Entre octubre y noviembre hicieron más de 30 conciertos, y ahora tienen casi 40 conciertos más programados hasta abril. Y es que bajo la autodescripción de «Hot, hot, hot Rhythm and soul», la aventura sólo puede estar servida.