De sangre africana, este productor y deejay nacido en el barrio londinense de Croydon es una de las personalidades más importantes de un género cada vez más en auge fuera de las fronteras del Reino Unido como es el Dubstep. Amablemente, nos atiende unas semanas antes de la publicación de su segundo LP en solitario Chapter II (Columbia/Sony). Componente del afamado colectivo Magnetic Man, afronta sin problemas todo tipo de preguntas desmarcándose de cualquier estilo musical. Benga es sólo Benga.
UMOmag.com: Ha pasado bastante tiempo desde tu último proyecto en solitario, Diary of an Afro Warrior (2008). Durante estos años has estado ocupado girando y trabajando con Magnetic Man. ¿Cuál es tu opinión acerca de la nueva era de la música electrónica? ¿Ha cambiado mucho o los fundamentos siempre se mantienen?
Benga: La música electrónica ha cambiado mucho y creo que uno de los puntos clave de la música en que he participado es que necesita líderes para mover las cosas en diferentes direcciones. Y de eso tratan mis álbumes: de ser un líder, intentando establecer un estilo o dar una dirección concreta a la música. Además, mi nuevo álbum es un disco para inspirar a los demás y creo que soy un líder, pero no hasta el punto de liderar a las masas hacia un camino… Se trata de que Benga sea Benga, no que pertenezca a un género, y en el proceso espero inspirar a otros para que hagan lo mismo; a llegar donde yo estoy.
UMOmag: Chapter II incluye 14 nuevas canciones y cuatro colaboraciones. ¿Consideras que éste es el álbum más ambicioso de tu carrera? ¿Por qué motivos?
B: Al 100%. Y ese es uno de los secretos para mí. Soy una persona ambiciosa y siempre voy a llevar las cosas al límite para intentar lograr lo máximo posible. Si me das dos cajas y una de ellas es más grande, siempre me decidiré por ésta. Abriré la caja grande; ese soy yo.
UMOmag: ¿Hay posibilidad de un Chapter III o cierras un ciclo con este segundo capítulo?
B: (Se ríe…). Sí, puede que haya un tercer capítulo. Seguro que sí.
UMOmag: Con tan sólo 15 años grabaste tu primer canción, «Skank». Ahora con 26 años, ¿cómo afrontas la producción musical?
B: Es una locura. Recuerdo que no sabía muy bien lo que hacía. Tenía 15 años e intentaba crear algo, sin saber realmente qué hacía. Una de las claves en la actualidad es que sé bien lo que hago en lo referido a la producción; tampoco es que sepa absolutamente todo, pero al trabajar en un disco sé por qué he utilizado una determinada línea de bajo o unos acordes concretos, por qué lo he mezclado con un cierto estilo y utilizado frecuencias específicas… Ahora sé lo que hago, no como antes.
UMOmag: ¿Cómo es Benga trabajando en el estudio? ¿Qué rutinas acostumbras a seguir?
B: Lo grabé en el estudio de mi casa. Monté un estudio en mi hogar en Gatwick y pasé allí cada día. Solía componer durante el día y relajarme un poco por la noche, escuchando música, para repetir el proceso al día siguiente, componiendo de nuevo.
UMOmag: Comenzaste este proyecto en 2011. ¿Cómo ha sido todo el proceso de creación y grabación de Chapter II? La elección de beats, las colaboraciones…
B: En general suelo estar en el estudio, componer un beat y recurro a un par de personas o tres para grabar voces sobre él. Conservo entonces la versión que más me gusta. Youngman ha participado mucho en el disco, pero también otros artistas; tampoco te puedo dar nombres concretos de otros que al final no aparecen en el disco, porque sería un poco maleducado por mi parte. Me limité a utilizar lo que mejor me sonaba en ese momento.
UMOmag: Nos ha gustado el concepto de tu nuevo vídeo «Forefather», volviendo a las raíces de la cultura urbana con la figura del productor y el MC ambientado en un sótano. ¿Sientes la necesidad de mirar al pasado para vivir el presente?
B: Siempre hay que mirar atrás, pero también hay que fijarse en cualquier cosa que te inspire. Y a veces no se trata sólo de la música. Puede que viajes a algún lugar y veas algo que te inspire de cierta forma. En ocasiones escucho las grabaciones de The Prodigy, porque es lo que me inspiró en un principio.
UMOmag: ¿La esencia de la «vieja escuela» británica está presente en tu nuevo LP?
B: El álbum de Benga es sólo Benga. Es creativo, con todo tipo de ángulos, muestra cómo solía ser aunque sigo siendo el mismo. Intento llevar las cosas al extremo y explorar varios caminos; ha sido así desde que era joven. Cuando trabajé en Diary of an Afro Warrior (Chapter I) hacía lo mismo que ahora: intentar ser lo más creativo posible.