La formación compuesta por Phonte (MC/cantante) y Nicolay (productor) nos ofrece su cuarto álbum de estudio. Una evolución natural que se ha desarrollado desde el Connected (2004) hasta este nuevo Living in Flying Colors donde hemos visto crecer musicalmente a este dúo hasta alcanzar una fusión de sonidos donde la electrónica converge con la música negra, y da resultado a un trabajo lleno de elegancia y madurez. Ellos lo tienen claro: su música ha de permanecer independiente. Si hasta ahora ha funcionado bien así seguro que seguirá dando sus frutos en los proyectos venideros.

 

UMOmag.com: El proyecto The Foreign Exchange se «cocinó» en internet. ¿Nos podéis explicar cómo se gestó la formación en sus inicios?

Nicolay: Nos reunimos en torno a 2002 gracias a la web OkayPlayer.com, que sigue existiendo. Es básicamente la página web de The Roots pero, en general, se trata de una comunidad musical. Grabamos nuestro primer trabajo, Connected (2004), sin ni siquiera conocernos en persona. Fue en 2006 cuando me mudé a EE.UU. y el grupo lanzó Leave It All Behind, y hasta ahora que hemos editado nuestro cuarto álbum.

UMOmag: En 2004 era menos común la creación de bandas a través de un medio tan potente en estos días para el trabajo como es internet. ¿Os consideráis unos adelantados a vuestra época? ¿Habéis creado «escuela» con respecto a nuevas formaciones que han surgido a través de la red?

Phonte: Creo que en ese momento hicimos lo que funcionaba para nosotros. Ni siquiera pensábamos que hacíamos algo extraño o inusual, nos limitamos a hacer el disco de la mejor manera posible. En la música, si hay química no importa si la persona está contigo en la sala o no… La música es algo universal y si hay química puedes hacerla.

UMOmag: Si escuchamos los temas del álbum Connected de 2004 en comparación con discos como Authenticity o esté último Love In Flying Colors, FE suena diferente. ¿Qué línea evolutiva destacaríais? ¿Hacia dónde ha evolucionado la musicalidad de FE?

N: En nuestro caso todo se reduce a la vida. En vez de trazar un camino concreto, cada uno de nuestros trabajos refleja dónde estamos en ese preciso momento de nuestra vida, lo que incluye gustos musicales o influencias. Opino que hemos crecido, evolucionado y mejorado; hemos aprendido muchas cosas y eso se traslada a la música. Si escuchas cada uno de nuestros discos en orden, encontrarás varios puntos en común; se trata de álbumes diferentes entre si, muy individuales, pero en la base de Connected hay gran parte de la esencia de lo que ahora hacemos. Aunque son diferentes entre si, comparten la misma base y una fórmula similar sin tratarse de una fórmula concreta.

UMOmag: ¿Cuándo y con qué objetivos se plantea la creación del sello discográfico Foreign Exchange Music?

P: Al crear el sello buscábamos la mejor manera de editar nuestra propia música, sin interferencias externas de ningún tipo. Y al hacerlo para nosotros, pensamos que también podíamos echar una mano a otros artistas con nuestra compañía: Zo, nuestro teclista, o Jeanne Jolly, que canta con nosotros. Empezó como un modo de editar nuestra música y evolucionó hacia algo más grande.

UMOmag: ¿Creéis en un modelo de creación y producción independiente frente a las grandes «majors» de la industria?

N: Sí. Un grupo como The Foreign Exchange no podría funcionar en un sello convencional y mucho menos en una multinacional. Estamos acostumbrados a arriesgarnos con nuestra música y hacer lo que queremos; si hubiese detrás un sello convencional siempre existiría un A&R u otra persona que intentaría llevar las cosas a su terreno. Creo que un grupo como nosotros ha de ser independiente; somos nuestros propios jefes y nos encargamos de las portadas, de la música, de quién toca en el disco o incluso de la impresión y fabricación. Todo está en nuestras manos y creo que es la única forma de hacerlo.

UMOmag: Vuestro primer LP Connected contaba con 17 tracks, y los siguientes Leave It All Behind, Authenticity y este último se reducen a alrededor de 11, ¿es una evolución natural o ha ido acompañado de las tendencias a nivel discográfico de trabajos con pocos tracks?

P: Es una evolución natural. En mi opinión, es preferible el modelo «menos es más». Hoy, la gente tiene mucho acceso a la música y si haces un disco con 14 0 15 canciones, quizá estás pidiendo demasiada paciencia al público. Tratamos de marcar una pauta; Connected era un proyecto más hip-hop, que ofrecía más espacio para realizar ciertas cosas y 14 temas no parecía entonces exagerado. Pero lo que hacemos ahora, que es algo más R&B, no necesita de tantas canciones para hacer llegar tu mensaje, es suficiente con 10 canciones… Si te fijas en Thriller, tenía 9 canciones. Creo que tiene mucho más que ver con el tipo de música que ahora hacemos, se trata de un género distinto.