Puede que le odies. Puede que le ames. Pero nada cambiará un hecho objetivo: Pitbull es el puto amo. Pero no sólo porque con su estilo haya regresado el Dad Swagg de pantalón de pinzas y pecho peludo palomo, o porque gracias a él, muchas cincuentonas vuelvan a sentirse peligrosas meneando el culo en las discotecas; que también.
Mr. Worldwide es el amo, sobre todo, por haber amasado en sus casi quince años de carrera una ristra de hits inabarcables que, desde lo sublime a lo infame, han hecho de él poco menos que un icono popular y cultural indiscutible en la vida de los hispanohablantes.
Sí, amigos. Puede que os duela, pero Armando Christian Pérez somos todos. Y lo sabéis…